Sistema Excretor
El sistema excretor es el sofisticado sistema de purificación y equilibrio del cuerpo. Su principal componente, el sistema urinario, trabaja incansablemente para filtrar la sangre, eliminando los productos de desecho del metabolismo y el exceso de sustancias para mantener nuestro medio interno estable y libre de toxinas. Es un guardián silencioso de la homeostasis corporal.

El Sistema Urinario: Filtración y Eliminación
Este sistema es el protagonista de la excreción y está formado por:
- Riñones: Son dos órganos vitales en forma de frijol, situados a ambos lados de la columna vertebral. Actúan como filtros de alta tecnología. Cada riñón contiene aproximadamente un millón de unidades funcionales microscópicas llamadas nefronas. En las nefronas, la sangre es filtrada, y las sustancias útiles (como glucosa, agua y sales) son reabsorbidas, mientras que los desechos (como la urea) y el exceso de agua forman la orina.
- Uréteres: Son dos tubos delgados que conectan cada riñón con la vejiga. Transportan la orina desde los riñones mediante contracciones peristálticas.
- Vejiga Urinaria: Es un saco muscular hueco y elástico que se expande para almacenar la orina. Puede contener entre 400 y 600 ml de orina cómodamente.
- Uretra: Es el tubo a través del cual la orina sale del cuerpo desde la vejiga. En los hombres, también es la vía de salida del semen.




Regulación y Otros Órganos Excretores
Más allá de eliminar desechos, el sistema urinario es clave para mantener el equilibrio del cuerpo (homeostasis):
- Regulación del Volumen Hídrico y la Presión Arterial: Los riñones ajustan la cantidad de agua que se reabsorbe, controlando así el volumen de sangre y la presión arterial.
- Regulación del Equilibrio Electrolítico: Mantienen niveles estables de iones importantes como sodio, potasio y calcio.
- Regulación del Equilibrio Ácido-Base: Ayudan a mantener el pH de la sangre en un rango muy estrecho y saludable.
- Otros órganos también contribuyen a la excreción: Los pulmones eliminan dióxido de carbono, la piel elimina agua y sales a través del sudor, y el hígado procesa muchas toxinas y productos de desecho para que puedan ser excretados por los riñones.



