El sistema endocrino es la red de comunicación química del cuerpo. A diferencia del sistema nervioso, que utiliza impulsos eléctricos para una comunicación rápida, el sistema endocrino utiliza hormonas, mensajeros químicos que viajan a través del torrente sanguíneo para regular procesos lentos y continuos como el crecimiento, el desarrollo, el metabolismo, el estado de ánimo y la función reproductiva.

Las Glándulas Endocrinas y sus Hormonas
Este sistema está compuesto por un conjunto de glándulas que producen y secretan hormonas directamente a la sangre:
- Hipófisis (o Pituitaria): Situada en la base del cerebro, es la 'glándula maestra' porque regula la actividad de muchas otras glándulas endocrinas.
- Tiroides: Ubicada en el cuello, produce hormonas tiroideas que son cruciales para regular el metabolismo general del cuerpo.
- Paratiroides: Cuatro pequeñas glándulas en la parte posterior de la tiroides que controlan los niveles de calcio en la sangre, esenciales para la función nerviosa y muscular.
- Glándulas Suprarrenales: Localizadas encima de cada riñón, secretan hormonas como el cortisol (que ayuda a responder al estrés) y la adrenalina (que prepara al cuerpo para la acción de 'lucha o huida').
- Páncreas: Además de su función digestiva, produce insulina y glucagón, hormonas vitales que regulan los niveles de azúcar (glucosa) en la sangre.
- Gónadas: Los ovarios en las mujeres y los testículos en los hombres. Producen hormonas sexuales (estrógenos y progesterona en mujeres, testosterona en hombres) responsables de las características sexuales secundarias y la reproducción.
- Glándula Pineal: En el cerebro, produce melatonina, que regula los ciclos de sueño y vigilia.




Cómo Funcionan las Hormonas
El mecanismo de acción hormonal es específico y se basa en un sistema de 'llave y cerradura':
Las hormonas viajan por todo el cuerpo, pero solo afectan a células específicas, llamadas células diana. Estas células tienen receptores en su superficie o en su interior que encajan perfectamente con una hormona determinada, como una llave en una cerradura. Cuando la hormona se une a su receptor, desencadena una respuesta específica dentro de la célula. Este sistema asegura que cada hormona realice su función solo donde es necesario.
La regulación hormonal a menudo funciona mediante un sistema de retroalimentación negativa (feedback negativo), donde el aumento del nivel de una hormona o su efecto inhibe la producción de la misma, manteniendo así el equilibrio.



